A la ULA le niegan más del 99% del presupuesto necesario para mantenerse operativa
Las universidades venezolanas, entre ellas la de Los Andes (ULA), se enfrentan a un Gobierno que no solicita desde hace unos tres años un anteproyecto de presupuesto, sino que impone un monto de forma arbitraria y unilateral: Esta vez la ULA solo recibió el 0.21% del dinero que requiere para gastos de operatividad, situación que la mantiene sin recursos para su funcionamiento e impide establecer planes de desarrollo.
Juan Carlos Rivero, representante de los profesores ante el Consejo Universitario de la ULA, explicó a Aula Abierta que para los gastos de proyectos para las facultades, núcleos y dependencias de 18.942.658 bolívares presupuestados solo se obtuvieron Bs. 40.000; por acciones centralizadas de 1.720.824 bolívares fueron enviados Bs. 206.643; mientras que de servicios básicos y de vigilancia no se recibió nada.
Este año, al igual que los anteriores, el dinero recibido no alcanza y para el mes de agosto no han recibido ni el 10% de lo asignado para funcionamiento. Rivero dijo que estos pocos recursos, generalmente, llegan acumulados para diciembre cuando no hay posibilidad de revisar los gastos. “Esto se traduce en una política de destrucción por diseño definida por el gobierno nacional”, dijo Rivero.
La ULA activa sin presupuesto
“La realidad es que la universidad está funcionando sin presupuesto”, afirmó el representante de los profesores Juan Carlos Rivero al equipo de Aula Abierta.
Las actividades semipresenciales son posibles mediante el uso de la tecnología y los esfuerzos del personal docente y de investigación, así como de los estudiantes. Sin embargo, las actividades de investigación y de extensión están prácticamente paralizadas, las publicaciones periódicas se realizan debido a los convenios internacionales y de empresas privadas.
“La universidad no tiene ningún plan para restaurar las instalaciones, los techos de los edificios están totalmente destruidos por las filtraciones, los jardines parecen una selva y el recinto se mantiene vulnerable ante el hampa porque no existe alumbrado y si se daña una bomba o cualquier equipo no hay como repararlo”.
Rivero también alertó que la mayor parte de los laboratorios no cuentan con materiales y reactivos. Las prácticas de campo no se están ejecutando y cuando se hacen es porque los estudiantes buscan los medios. La insuficiencia presupuestaria de la ULA impide el normal desarrollo de las actividades académicas, afectando la educación de calidad en esa institución de educación superior.
Además, los servicios estudiantiles desaparecieron por completo, obstaculizando que muchos jóvenes puedan culminar sus carreras. “Los que pueden estudiar hoy día son estudiantes de familias de ingresos medios o altos”.
El representante de los profesores ante el CU de la ULA aseguró que, de recibir el presupuesto idóneo, se podría adquirir el equipamiento para modernizar la infraestructura tecnológica y así mejorar la eficiencia de la educación. No obstante, se podrían financiar los programas de investigación y aportar en innovaciones tecnológicas en aras de solventar problemas importantes en el país.