Universidades vacías: el drama de la deserción estudiantil
Los niveles de deserción estudiantil han alcanzado cifras alarmantes: de acuerdo a reportes, podría haber superado en 2019 el 50 % en las universidades más importantes del país.
Las principales causas de este dramático fenómeno se relacionan con la crisis de los servicios estudiantiles: en 2019 se redujo el porcentaje de autobuses que cubrían el servicio de transporte, se incrementó el número de comedores cerrados y se redujo el suministro de los comedores.
Además, surgieron otras problemáticas como baños fuera de servicio, bibliotecas cerradas o sin presupuesto, aulas desbalijadas y sin condiciones para asistir a clases.
En 2018, Aula Abierta alertó acerca de la deserción estudiantil, que para ese entonces empezaba a ser preocupante, pues el país se quedaba sin los jóvenes que se formarían con pensamiento crítico para la reconstrucción de Venezuela con miras al futuro. Sin embargo, en 2019 estos datos se incrementaron notablemente según el secretario de Asuntos Académicos de la Asociación de Profesores de la Universidad Central de Venezuela (UCV), José Gregorio Alfonso.
Alfonso destacó como ejemplo representativo de las universidades vacías, que la Facultad de Humanidades y Educaciónde la UCV sólo está operativa en un 40%, producto de la deserción.
Por su parte, el presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela (FCU-UCV), David Sosa, aseguró que la deserción estudiantil en las principales casas de estudios del país se ubica entre el 40 y 50 por ciento.
“Las principales causas que provocan el abandono de las aulas de clases se relacionan con la crisis de los servicios estudiantiles como transporte, comedor y los inexistentes montos para becas estudiantiles. El gran porcentaje de estudiantes han abandonado las aulas para incorporarse al mercado laboral y contribuir con los gastos en la familia”, destacó Sosa.
Miguel Barone, secretario de Asuntos Nacionales de la FCU-UCV y miembro del movimiento Gritemos con Brío, afirmó que en la mayoría de las facultades de esa casa de estudio hay una deserción estudiantil mayor al 40%.
“Cuando entré a la Universidad hace cuatro años, éramos 1 200 estudiantes en la escuela y hoy quedamos menos de 350. En la Universidad no tenemos servicios de comedor, tenemos las rutas de transporte bastante contadas y la beca estudiantil es de 800 bolívares”, puntualizó.
Tal y como se advirtió en el “Informe preliminar: Deserción universitaria en Venezuela”, el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología (MPPEUCT) y la Oficina de Planificación del Sector Universitario (OPSU) han fungido como los principales responsables en lo que respecta al mal funcionamiento o inactividad total de los servicios estudiantiles en las universidades.
Autoridades de distintas casas de estudios han denunciado que los referidos órganos centralizan el suministro de insumos y otros elementos necesarios para el funcionamiento de los servicios estudiantiles, imponiéndose como regla el desabastecimiento a las universidades por parte del MPPEUCT en periodos que se extienden hasta por 5 meses continuos.
Chamos que caminan
Los núcleos de las distintas universidades reportaron durante 2019, que cuentan con pocas unidades de transporte disponibles para cubrir solo algunas de las rutas estudiantiles, en otros casos ni existen: son más los vehículos sin las condiciones para transitar, porque no tienen batería, motor, cauchos o combustible.
Estas deficiencias en el servicio de transporte son inducidas por la asfixia presupuestaria a la que es sometida la universidad. El número de jóvenes deben caminar kilómetros para llegar a su casa de estudio aumentó, pues carecen de efectivo para pagar un trasporte público.
En junio, la rectora de la Universidad de Carabobo (UC), Jessy Divo de Romero, se pronunció ante la crisis del transporte estudiantil y denunció que este problema es una de las razones de la deserción: “la asistencia estudiantil se ubicó en un 37%”.
La rectora Divo de Romero destacó que la UC contaba con 27 rutas de transporte, pero el número se redujo a 6 unidades operativas y actualmente tienen 54 paralizadas.
Escenarios parecidos se repiten en casas de estudios como la Universidad Central de Venezuela (UCV), la Universidad del Zulia (LUZ), la Universidad Simón Bolívar (USB), Universidad de Oriente (UDO) y la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), entre otras.
Comedor estudiantil en penumbras
Durante este año las universidades han recibido un despacho irregular de los proteicos y otros insumos por parte del MPPEUCT. Esta situación ha afectado considerablemente el suministro del menú estudiantil en algunas universidades, hasta el punto de que algunos comedores han cerrado.
Uno de los casos más significativos es el de la Universidad de Los Andes, donde han tenido que ubicar los alimentos con proveedores externos. Según el dirigente estudiantil, Humberto Araujo, alrededor de 5 mil estudiantes son afectados.
Asimismo, el director de Desarrollo y Servicios Estudiantiles (DIDSE) de la Universidad del Zulia, Rafael De Espagñolis, aseguró que el Ministerio de Educación Universitaria ha enviado la proteína y carbohidratos como arroz, harina precocida de maíz o trigo, granos, aceite, caraota, arroz, pasta. Sin embargo, desde el mes de marzo se encuentra cerrado el comedor central porque no cuentan con los insumos para seguir funcionando.
Además, se vencieron los contratos con los concesionarios que proveían la comida.
Becas estudiantiles insuficientes
Para el 2019 el monto de las becas estudiantiles está completamente desfasado respecto a la economía actual y a los índices inflacionarios.
El director de la Dirección de Desarrollo y Servicios Estudiantiles (DIDSE) de la Universidad del Zulia, Rafael De Espagñolis, aseguró que desde el mes de abril de 2019 no se pagan las becas porque solo recibieron el dinero hasta ese mes.
“No se ha recibido ningún tipo de aporte por parte del Ministerio de Educación Universitaria por concepto de becas desde el mes de mayo. Para diciembre de 2019 aún se encuentran a la espera de recibir los recursos correspondientes”, expresó.
A pesar de que el Ejecutivo Nacional anunció, en noviembre de 2019, un aumento de las becas estudiantiles a Bs 75.000,00, la DIDSE no ha recibido un oficio formalizando la información, no se ha especificado la fecha del aumento ni la forma de pago.
Aula Abierta evidenció estos datos en el informe preliminar “Universitarios en el marco de la Emergencia Humanitaria Compleja Venezolana”, donde exhorta al Estado venezolano a realizar asignaciones presupuestarias adaptadas a los requerimientos realizados por las universidades.
Un llamado urgente a proteger a los estudiantes
Desde Aula Abierta exigimos mejoras de los servicios estudiantiles y reclamamos por un monto de las becas que aporten a cubrir eficientemente las necesidades básicas de los jóvenes universitarios, como comprar un libro, pagar fotocopias e impresiones. Los estudiantes son el futuro del país y deben atenderse urgentemente sus carestías si se quiere que Venezuela progrese.