RELE alerta un panorama desolador para la libertad de expresión en Venezuela
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) presenta un análisis profundo y detallado sobre la alarmante situación de la libertad de expresión en Venezuela, donde la voz crítica y el periodismo independiente son sistemáticamente silenciados bajo un manto de intimidación, censura, opacidad y represión.
En Venezuela, el ejercicio del periodismo independiente se ha convertido en una actividad de alto riesgo. Los periodistas que se atreven a investigar o informar sobre las actividades del gobierno o a levantar la voz frente a las injusticias se enfrentan a una ola de hostilidades, incluyendo: intimidaciones y amenazas, agresiones físicas y ataques a instalaciones, censura y confiscación de equipos, estigmatización y campañas de difamación.
A la grave situación que enfrentan los periodistas, se suma la falta de acceso a la información pública, un elemento fundamental para el ejercicio del periodismo y el derecho de la ciudadanía a estar informada.
En este sentido, RELE expone que existen mecanismos de negación sistemática de solicitudes de información, es decir, las solicitudes de información pública presentadas por periodistas, organizaciones de la sociedad civil y ciudadanos en general son negadas sin justificación legal. Asimismo, existe opacidad en la gestión pública. El Estado venezolano mantiene un velo de opacidad sobre su gestión, ocultando información relevante al público y dificultando el control social y la rendición de cuentas. E incluso, niega las estadísticas oficiales que podrían revelar, o no, una crisis humanitaria compleja sin precedentes. Esto incluye la falta de mecanismos de transparencia para garantizar una gestión pública correcta. Estas condiciones provocan que la libertad de expresión en Venezuela se vea aún más amenazada por la existencia de leyes que criminalizan la disidencia y el periodismo independiente. Entre ellas destacan la Ley del Odio, el proyecto de Ley de Fiscalización de las Organizaciones no gubernamentales, y, la actual propuesta del gobierno nacional, la Ley Contra el Fascismo.
Posición de la CIDH
Ante la grave situación de la libertad de expresión en Venezuela, la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH solicita al Estado venezolano cesar de inmediato las graves violaciones a la libertad de expresión, garantizar un ambiente seguro y propicio para el ejercicio del periodismo independiente, investigar de manera imparcial y efectiva todas las agresiones contra periodistas y defensores de derechos humanos, derogar la Ley Contra el Odio y retirar el proyecto de Ley de Fiscalización de ONG, y garantizar el pleno acceso a la información pública.