Militares invaden terrenos de la Reserva Ecológica de la Universidad Simón Bolívar
El equipo de vigilancia de la Universidad Simón Bolívar (USB) reportó que hay presencia de militares en los bosques de la reserva Ecológica Simón Bolívar, parte integral del campus universitario, donde realizan prácticas y recorren frecuentemente las vías, así lo dio a conocer el profesor EdgardYerena,fundadordelserviciodeguardabosquesuniversitariosyplanificadordelareservaecológicadelaUSB. Esta invasión representa una violación a la autonomía universitaria y un impacto negativo al medio ambiente.
Yerena indicó quelos vigilantes manifestaron queen la zonaal parecer se realizan prácticas de tiro, siendo un área natural en donde no debe haber ningún tipo de perturbación, menos de índole militar, pues las actividades prácticas implican cambios en la cobertura y producen una contaminación sónica. Sin embargo, los militares hicieron caso omiso a las advertencias dadas por parte de la universidad.
Vilisa Morón, presidenta de la Sociedad Venezolana de Ecología,asegura que no hay una información específica sobre las prácticas militares que se desarrollan dentro del área, sin embargo, un funcionario retirado de la Guardia Nacional comunicó que los campamentos requieren la limpieza y aplanamiento del terreno, así como la tala de árboles para la instalación de la carpa grande de enfermería en donde se puedan atender al menos a 10 personas a la vez, así como carpas pequeñas en donde agrupan a las estudiantes o funcionarios en pareja; además, les corresponden cavar huecos para letrinas y deben ser tantas como el personal que se encuentre realizando las prácticas.
Además, las prácticas militares requieren la construcción de canchas de infiltración en donde se realizan maniobras, hacen uso de gas, instalan alambres de púas, cauchos para canchas de obstáculos, aprovechan los riachuelos para diseñar escenarios de persecución y darle dificultad a la práctica.
Otra actividad que atenta contra el medio ambientees la cancha de tiro y en ella se requiere la adecuación del terreno, en donde se utilizan fusiles y armas de calibre alto (762, 761), así como la posible construcción de fosas para la prueba de valor (hueco de 1m de profundidad) en donde explotan granadas para que los militares se acostumbren a la detonación. Finalmente, en función de poner a prueba las habilidades de los militares, también es posible realizar prácticas en donde solo les dan agua y deben cazar, encender fogatas, etc.
Morón advirtió en entrevista para Aula Abierta y Cepaz que la invasión de este espacio de conservación universitario es preocupante por la fragante violación a la autonomía universitaria y por la potencial degradación al espacio natural que posee bosques de pino y bosques naturales en donde habitan diversas especies de mamíferos, entre ellas el cachicamo, pereza y puerco espín.
También habitan más de 100 especies de aves y varias especies de reptiles, anfibios e insectos, los cuales se van a ver afectados por la pérdida de cobertura vegetal, contaminación sónica y una posible contaminación de los afluentes subterráneos por infiltración. Además, es un espacio en donde se produce agua para la comunidad universitaria, se controla la erosión del suelo y se lava continuamente por las lluvias, captura carbono atmosférico, mantiene el clima localy representa un laboratorio para el desarrollo de clases y líneas de investigación.